16-06-2012
Después de todo un año de preparación... Ya había llegado el día! Todo un año esperando para confirmar mi fe como cristiana, todo un año esperando ese día... Y llego tan rápido!Al principio, nadie de nosotros estaba seguro porque hacia este camino, quiza fue más por intriga, ver de que se trataba... Pero no me arepiento ni un poco de nada de lo vivido. Mi fe creció 50 veces más a lo que era a principios del 2011 y el espíritu santo actuo en mi, a su manera, y poco a poco me va cambiando la vida; me llena. Estoy plenamente entregada a él, porque se que es el único que me puede dar la Fortaleza, la Piedad, el Temor de Dios, la Sabiduria, la Ciencia, el Entendimiento y el Consejo que necesito. Este camino, ese momento, todo es maravilloso y de lo que no te podés arrepentir por nada del mundo!
La misa fue un momento de muchos nervios, ansiedad, miedo a tropezar... Pero finalmente llegué al altar y para la crismación me dijieron: "Delfina, recive por esta señal el don del Espíritu Santo"... Y me sentí completa, feliz, sin preocupación.
Creo que a la persona que más le debería agradecer por ese hermoso camino y por estar ahora y siempre es a mi padrino, Gonzalo Ariel Hernandez. Sin él no sería quien soy ahora, me ayudó a crecer y a levantarme cuando caí. Estuvo en momentos clave en los que necesitaba sus abrazos y unas palabras que me hagan volver a sonreir. Simplemente, estuvo siempre...
Pero esto no termina acá... Esto recién empieza! La confirmación solo fue el ruido del silbato que indicó el comienzo del partido de todos nosotros contras los pecados e injusticias. Lo más importante, es PERMANECER; sólo con eso es posible llenarse de Dios y su Espíritu.
"Permanezcan en mi amor"